
Tu información no será usada o compartida ningún otro fin.
© 2017 Los Cuatro Caminos
El cristal del chamán, o cristal de doble terminación, es una catedral de luz que utilizamos para extraer energías y entidades de nuestros clientes. A continuación, llamamos a las cuatro direcciones y a nuestro linaje de sanadores para que lleven estas entidades y energías a casa, a donde necesitan ir para sanar o para ser devueltas a la tierra.
Los cristales son las estructuras más estables de la naturaleza y son ideales para extraer energías y entidades intrusivas. Son transductores, lo que significa que pueden convertir un tipo de energía en otra. El tipo de cristal recomendado para los estudiantes es el de doble terminación, de aproximadamente 1 a 2 pulgadas de diámetro y de 4 a 5 pulgadas de longitud. El cristal debe ser ópticamente claro (sin inclusiones ni grietas). El número de facetas o lados no es significativo.
Los chamanes utilizan estos cristales para eliminar de forma segura entidades y energías. Las energías o entidades intrusivas son espíritus desencarnados atrapados entre este mundo y el siguiente. Se adhieren a un chakra y a través de él se conectan al sistema nervioso central donde entran en una relación parasitaria con el huésped. Las entidades intrusas son, en su mayoría, almas perdidas que buscan la sanación como sea, pero hay excepciones: de vez en cuando nos encontramos con lo que yo llamo un “desagradable”.
Muchos problemas psicológicos y físicos son causados o exacerbados por ellas, como la ansiedad, la depresión, las adicciones, los cambios de humor y una serie de otros síntomas. Una vez liberada la entidad intrusiva, el cliente puede cambiar más fácilmente su comportamiento y a menudo experimenta una sanación espontánea.
Al final del proceso de extracción, nos queda una entidad o energía dentro de nuestro cristal. Si es posible, puedes animar a tu cliente a que te acompañe mientras liberas la energía del cristal. Ten siempre al cliente detrás de ti mientras realizas este trabajo, ya que puede seguir teniendo afinidad con la energía o entidad que se está liberando.
Comenzamos el proceso abriendo espacio sagrado utilizando nuestra agua florida (citar el blog de agua florida) para convocar los cuatro puntos cardinales y nuestro linaje de sanadores. A continuación, encendemos un fuego en una cacerola de aluminio o pyrex con aproximadamente 1 taza de sales de Epsom y 1 tapón de alcohol de 90 grados. A continuación, pasamos el extremo más ancho del cristal por el fuego tres veces, calentando el cristal y rociando con agua florida, y pasamos el cristal tres veces más para animar a la entidad o energía a salir del cristal por el extremo más pequeño mientras soplamos la energía hacia las cuatro direcciones.
Mientras soplamos nuestro cristal, podemos observar cómo la energía o entidad sale del cristal: bien hacia arriba si es una entidad y es tomada por el linaje para su sanación, o bien hacia abajo para reunirse con la Pachamama si es una energía.